Padres y estudiantes han mostrado un alto nivel estrés por la cantidad de tareas escolares que están recibiendo en casa. Son en general tareas que cubren los contenidos que profesores y colegios preocupados sienten necesidad de cubrir para evitar retrasos curriculares. Sin embargo, en esta época de estrés e incertidumbre, el contenido se descontextualiza, pierde importancia y se vuelve una carga.
¿Cómo trabajamos entonces las tareas escolares desde otro lugar? En momentos de incertidumbre como ahora, donde sucede algo que nunca antes había ocurrido, más que saber qué ha pasado debemos saber cómo actuar, y esto requiere habilidades como las que menciona Carlos Magro en su LABTalk de Santillana.
Magro enfatiza especialmente la habilidad de autonomía para poder sobrellevar el momento complejo que se está viviendo. Dentro de un marco de educación sistémica, donde las habilidades son el eje fundamental de la educación, se entiende que el objetivo fundamental es preparar a los estudiantes justamente para abordar problemas complejos. La complejidad de esta situación es obvia, teniendo en cuenta todos los ámbitos que la atraviesan:
Todas estas cuestiones hacen que el problema no pueda ser abordado desde un solo punto de vista y que se entienda la importancia de la transdisciplinariedad en los procesos de toma de decisiones a nivel mundial, regional, nacional y familiar. Esto, más un amplio conocimiento de contenidos, requiere del desarrollo de habilidades y de hacerse preguntas profundas y difíciles.
¿Qué habilidades trabajar? ¿Desde dónde abordarlas? El siguiente modelo representa tres tipos de habilidades: las personales, las sociales y las globales.
Entonces, respondiendo a la pregunta ¿cómo trabajamos entonces las tareas escolares desde otro lugar? Trabajando las habilidades desde sus tres ámbitos. En este momento de contingencia podemos sugerir algunas habilidades prioritarias específicas:
Todo esto con el objetivo de trabajar la habilidad central: la toma de decisiones. Si nos concentramos en el desarrollo de estas habilidades, más que en cubrir un contenido académico, estaremos ayudando a aliviar el estrés familiar de las tareas en casa. Además, las familias podrán tener más tiempo y espacios para desarrollar estrategias para afrontar este momento complejo desde un lugar propositivo y salir fortalecidas frente a los nuevos retos que lleguen.
